Los 5 buscadores líderes del mercado inmobiliario

Son las plataformas digitales líderes del mercado. Concentran millones de visitas cada mes. Están a la vanguardia de las nuevas tendencias y en constante evolución.

El desarrollo de nuevas herramientas tecnológicas y de estrategias de comunicación y gestión que priorizan las necesidades del cliente constituyen la clave del éxito de los cinco grandes del mercado inmobiliario local.

El mercado inmobiliario tradicional debe, necesariamente, reciclarse para sobrevivir. Por un lado, en lo inmediato, tiene que hacer frente a la crisis de coyuntura dada por las propias características del mercado local y la crisis económica que atraviesa el país. Y, por otro lado, debe pensar de qué manera se acopla a la transformación general del mercado inmobiliario global que impulsan las proptechs o las llamadas empresas tecnológicas.

En Argentina, esta transformación está ocurriendo y es liderada por empresas como ZonaProp, ArgenProp, Mercado Libre Inmuebles, Properati y Mudafy. Algunas tienen más de una década de trayectoria y otras recién saltaron al mercado en los últimos años, pero todas comparten la visión de que la evolución del mercado inmobiliario es a través de la tecnología.

La revolución de las proptechs

En los últimos cinco años la explosión del mercado proptech impuso la digitalización y el uso de nuevas herramientas tecnológicas como base fundamental para cualquier proyecto inmobiliario. Inteligencia Artificial, Big Data, Realidad Virtual y Tokens, entre otros conceptos, ya son de uso corriente en el ámbito inmobiliario.

Estas nuevas herramientas y conceptos atraviesan de manera integral el mercado inmobiliario aportando soluciones a todos los actores del sector. Apuntan principalmente al público general que necesita alquilar o comprar una propiedad, pero también aporta mejoras en los procesos de venta y desarrollos inmobiliarios. En la actualidad, ya es posible alquilar o comprar una casa o departamento sin la necesidad de visitar personalmente la propiedad.

Una de las claves para entender la visión de las proptechs es que invierten tiempo y recursos para detectar las necesidades de sus clientes. En este sentido, el principal objetivo de estas empresas es hacerle más fácil la vida a aquellas personas que necesitan alquilar, comprar o vender una propiedad. Para lograrlo, diseñan herramientas que simplifican los procesos, los hacen más sencillos y transparentes, más rápidos, permiten ahorrar tiempo y dinero. Y al mismo tiempo, otra de las claves del éxito, no pierden de vista brindar al cliente una atención personalizada a través de diferentes asesores y especialistas.

El sector inmobiliario tradicional aún resiste estos cambios, sin embargo los agentes inmobiliarios que más pronto se adapten y adopten las nuevas herramientas y servicios ofrecidos por las proptechs contarán con ventaja a la hora de prescribir mejores soluciones a sus clientes.

El análisis de información como clave del éxito

El ciclo de vida de una operación inmobiliaria, ya sea alquiler o compra, tiene un enorme potencial para generar información valiosa para las empresas del sector. Las proptechs trabajan mucho tiempo "off line" detectando las necesidades de los clientes desde el momento en que comienzan la búsqueda del inmueble hasta que firman un contrato o la escritura. Una vez identificada la necesidad se crea la herramienta que dará soporte a un proceso que combina tecnología con personalización.

Gracias al procesamiento de datos masivos (Big Data) las empresas pueden identificar patrones de comportamiento y tendencias que ayudan a los buscadores a organizar a los usuarios según sus perfiles y necesidades y permitiéndoles realizar predicciones más exactas.

Lo mismo ocurre con las propiedades. El cruce de información de georeferenciación a nivel barrio, manzana o cuadra aporta datos muy valiosos para el mercado. Este tipo de análisis permite conocer con mucha precisión las características de las propiedades y de los lugares donde se encuentran, algo muy valioso por ejemplo para determinar o estandarizar una tasación o los valores reales de la propiedad.

Algunas de estas empresas cruzan, además, los datos recogidos por sus propias herramientas con información pública estatal y la propia información que dan los usuarios en Internet y las redes sociales teniendo de esta manera más certeza sobre las necesidades de los clientes o usuarios de los buscadores.

La disponibilidad de esta información permite a los buscadores y a otras proptechs no solo llegar con mejores soluciones y servicios a quien necesite alquilar o comprar una propiedad, sino también resulta muy valiosa para la industria del desarrollo inmobiliario. La misma tecnología de cruzamiento de datos permite identificar zonas con alto potencial para nuevos emprendimientos, planificar el proceso de construcción, mejorar el sistema de asignición de créditos e, incluso, permite realizar proyecciones sobre el tiempo que demorará el mercado en absorber los nuevos desarrollos.

El futuro colaborativo

Cientos de proptechs se metieron al mercado inmobiliario en los últimos años, sobre todo en Estados Unidos y Europa, y América Latina no es la excepción. México y Brasil por territorio y volumen están a la cabeza, pero también Argentina está viviendo su auge.

Algunos referentes y especialistas del sector estiman que esta tendencia inevitablemente llevará a una concentración de las empresas tecnológicas. El proceso de alianzas o fusiones entre las empresas proptech impulsará el mercado, basando el crecimiento en el espíritu colaborativo y la innovación tecnológica. De hecho ya está ocurriendo a varios niveles. A finales de 2021 la inmobiliaria digital brasileña QuintoAndar compró Zonaprop y el año pasado Properati pasó a manos de LIFULL Connect. Más recientemente, Mercado Libre Inmuebles selló una alianza con Simplestate, una proptech argentina que desarrolló una plataforma digital para inversiones en desarrollos inmobiliarios.

El camino tecnológico está marcado. Las nuevas herramientas que implementan los buscadores líderes apuntan a un futuro en el que comprar una vivienda no sea un proceso traumático, árido y complejo, sino todo lo contrario: la experiencia del cliente debe ser grata, sencilla, ágil y sobre todo transparente.