Un día después de los graves hechos de violencia registrados en las inmediaciones de la Legislatura de Jujuy y que terminó con una violenta represión del Gobierno de Gerardo Morales, el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, adelantó le pidió al gobernador “las pruebas” sobre los supuestos vínculos de la Rosada con los incidentes.
Fernández salió al cruce de los señalamientos del referente del radicalismo quien el martes, tras la jornada violenta y con varios heridos, dijo que tanto el presidente Alberto Fernández como la vicepresidenta Cristina Fernández Kirchner y el titular de la cartera de Seguridad estaban detrás de lo sucedido. “¿Ustedes pueden creer semejante estupidez? Díganme una persona que haya actuado, que la hayan visto, impulsada, financiada, acompañada o incitada para ir a provocar un problema a Jujuy”, respondió Fernández este miércoles desde la puerta del ministerio que comanda.
Luego de esa frase, al ser informado por los periodistas que Morales había indicado que en las próximas horas iba a mostrar pruebas para confirmar sus denuncias, respondió: “Que las muestre. Es mentira”. Asimismo, indicó: “Que las presente pero seguimos hablando de algo que no tiene; porque si tenés una prueba, la exhibís en el mismo momento en que estás. Esto de pasar un dato 24, 48 horas después no tiene ningún sentido”.
Tras ello insistió en la inconsistencia de las acusaciones y remarcó: “Por qué me la tengo que bancar y andar dando explicaciones de lo que el gobernador dice. Lo que dice el gobernador dice es mentira”.
Ayer Morales difundió unos supuestos chats en los que se llamaba a marchar a cambio de dinero y otro con una foto de un grupo de La Cámpora que había sido enviada a Jujuy. Sin embargo, esa imagen era de abril de 2022, y no fue sacada en Jujuy, sino en Guernica, por lo que el gobernador después la borró.
Por otra parte, Fernández consideró que “la represión nunca es buena” y, al mismo tiempo, comunicó que no enviará fuerzas federales a dicha jurisdicción. “No envío fuerzas federales porque no corresponde que lo haga. Si hay alguien que tiene vocación de hacerlo que lo diga”, apuntó.
“Las fuerzas federales no pueden intervenir en una provincia sin la autorización previa ni el armado de un Consejo. Yo no tengo una orden”, dijo.
Convencido de su decisión, el funcionario del Gobierno subrayó: “La Policía de Jujuy es la que está actuando, nosotros no tenemos nada que hacer ahí”. Y en la misma línea, agregó: “Nosotros miramos con mucho detenimiento y preocupación porque la represión nunca es buena”.