Un edificio diez pisos se derrumbó este martes en la ciudad balnearia de Villa Gesell. El trágico hecho ocurrió alrededor de la una de la madrugada en el Hotel Dubrovnik, ubicado en Buenos Aires y avenida 1.
Por el momento, se confirmó que hay una víctima fatal, un hombre de más de 80 años. Mientras que una mujer de edad avanzada pudo ser rescatada con vida de entre los escombros.
Los bomberos continúan trabajando en el lugar, remueven los escombros de modo manual, y buscan a entre 7 y diez personas desapareciedas, que se cree que podrían haber quedado atrapadas.
El municipio de Villa Gesell aseguró que en el hotel se estaba realizando"una obra clandestina, sin cumplir con la normativa municipal".
“Quiero a mi flaco vivo”, expresó con desesperación Silvana, la madre de Nahuel Stefanic, el joven de 25 años que vivía en el Apart Hotel Dubrovnik con su tía Rosita, la dueña del lugar.
Según contó la mujer, Nahuel trabaja en una cafetería y antes de la tragedia había ido a pescar junto a Diego, uno de los operarios que participaba de las reformas que se hacían en el hotel.
Diego llegó a escapar en medio del derrumbe. “Le pregunté quiénes estaban adentro y me dijo que Rosita, Nahuel, Dana y los chicos”, contó Andrés, un amigo de Nahuel que se acercó a la zona tras escuchar los fuertes ruidos que se sintieron por el colapso del edificio.
En agosto de 2024, el Municipio de Villa Gesell había detectado obras en curso sin autorización municipal en el Hotel Dubrovnik, por lo que labró un acta de paralización.
"Posteriormente, los propietarios solicitaron autorización para realizar algunos trabajos en la planta baja (cambio de carpinterías, revestimientos de pisos, pintura interior, cambio de revestimientos de baño y reemplazo de mesadas), los cuales fueron aprobados exclusivamente para esa área, en planta baja y no en altura", señaló el municipio.
Saúl, un vecino de Villa Gesell que vive a la vuelta del Hotel Dubrovnik, contó que al momento del derrumbe "se movió todo" en la zona.
"Estaba mirando una película y 00.05 fue la primera explosión. Se me movió todo, me pegué el susto de mi vida. A las 00.30 se desplomó, fue el segundo estruendo y se me movió todo el departamento. Tembló todo, pero no hubo rajaduras", relató en diálogo con TN.
"Salí y segundos después el edificio desapareció en medio del polvillo. Cuando vi que el hotel no estaba más, me quedé duro. Nunca me asusté tanto, me temblaban las piernas", confesó.