
El Gobierno nacional estableció una nueva medida que obliga a las empresas de medicina prepaga a informar previamente los aumentos en las cuotas a la Superintendencia de Servicios de Salud, antes de notificarlos a sus afiliados. La decisión fue oficializada este viernes mediante la Resolución 645/2025, publicada en el Boletín Oficial.
La nueva modalidad apunta a ejercer un mayor control sobre las subas en el sector, luego de una extensa disputa en 2024 por el fuerte incremento de las cuotas, que no logró ser contenido pese a acciones judiciales y reclamos oficiales.
Según indica la resolución, “la comunicación a la Superintendencia debe efectuarse dentro del mismo plazo previsto para la notificación a los afiliados. El cumplimiento de este procedimiento es considerado un requisito indispensable para que la comunicación posterior a los usuarios sea considerada válida”.
La medida busca, según el texto oficial, “fortalecer la capacidad de fiscalización del organismo y garantizar el acceso simultáneo a la información por parte de los usuarios y del Estado”.
Con esta decisión, el Ejecutivo intenta frenar posibles abusos por parte de las compañías del sector, en un contexto en el que la inflación y la pérdida de poder adquisitivo han golpeado con fuerza a los hogares que destinan parte de sus ingresos a la cobertura de salud privada.