
El paro de los controladores aéreos anunciado por la Asociación de Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Aeronavegación afectará vuelos nacionales e internacionales entre el 24 y el 31 de mayo, con cese parcial de actividades.
El gremio confirmó que realizará seis jornadas de medidas escalonadas, con interrupciones de entre tres y cuatro horas por día. Si bien no se trata de una suspensión total de los servicios, se prevén demoras, reprogramaciones y cancelaciones, según lo determinen las compañías aéreas.
El conflicto se origina por la falta de actualización salarial y la negativa del Gobierno a otorgar incrementos en la negociación colectiva. Según el gremio, la oferta de la Empresa Argentina de Navegación Aérea (Eana) para el período 2024/2025 fue del 0%.
El primer paro comenzará el sábado 24 de mayo, afectando a los vuelos internacionales entre las 13hs00:00 y las 17hs00:00. Al día siguiente, el domingo 25, la medida alcanzará a los vuelos de cabotaje, de 19hs00:00 a 22hs00:00.
La protesta continuará el martes 27, también sobre vuelos domésticos, entre las 8hs00:00 y las 11hs00:00. En tanto, el miércoles 28 será el turno de los vuelos generales y comerciales no regulares, con una franja afectada de 12hs00:00 a 16hs00:00.
El viernes 30 se interrumpirá la operación de vuelos generales y no regulares entre las 13hs00:00 y las 17hs00:00, y nuevamente los internacionales, entre las 19hs00:00 y las 23hs00:00.
Finalmente, el sábado 31 de mayo, el paro abarcará a toda la aviación civil, con dos ventanas horarias: de 10hs00:00 a 13hs00:00 y de 16hs00:00 a 19hs00:00.
Desde el sindicato confirmaron que los vuelos de emergencia, sanitarios, humanitarios, estatales y de búsqueda y rescate estarán exentos de la medida. No obstante, cualquier otro tipo de operación podría verse afectado en las franjas señaladas.
Hasta el momento, las aerolíneas no comunicaron cancelaciones masivas, pero sí recomiendan consultar el estado del vuelo con anticipación, prever más tiempo en los aeropuertos y verificar las condiciones de reprogramación con la empresa emisora del pasaje.
La conducción de Atepsa denunció no sólo la falta de aumentos en más de ocho meses, sino también despidos, vaciamiento institucional y cierre del centro de formación profesional del sector. En un comunicado, los dirigentes gremiales afirmaron: “Estamos convencidos de que nuestros salarios deben crecer por encima de la inflación”.
La disputa refleja un clima de tensión laboral en el sector aéreo, que atraviesa un proceso de ajuste estatal con impacto en la operatividad de Eana, la empresa pública encargada de la navegación aérea en Argentina.
La medida de fuerza pone en alerta a pasajeros, aerolíneas y operadores aeroportuarios, que ya comenzaron a delinear esquemas alternativos para mitigar el impacto operativo durante la última semana de mayo.