El Gobierno nacional deberá abonar este lunes US$822 millones al Fondo Monetario Internacional (FMI) en concepto de intereses del préstamo de US$45.000 millones otorgado en 2018. El pago se realizará con reservas internacionales, que actualmente rondan los US$40.495 millones, y no podrá postergarse por tratarse de un compromiso de intereses y no de capital.
A lo largo de noviembre, los vencimientos en moneda extranjera sumarán US$1.038 millones, al incluir otros US$217 millones con distintos organismos multilaterales. Este nuevo pago impactará en una reducción de las reservas, que habían sido parcialmente reforzadas por el préstamo de US$20.000 millones firmado en abril.
Desde el Ministerio de Economía informaron que se trabaja en un programa de recompra de reservas, aunque admiten que el inminente pago al FMI limitará su ejecución.
En principio, el desembolso iba a estar compensado con una transferencia del FMI por unos US$1.000 millones, correspondiente a la última revisión del acuerdo vigente. Sin embargo, esa auditoría fue postergada hasta enero, luego de que se flexibilizaran las metas de acumulación de reservas. Hasta entonces, no se esperan nuevos giros del organismo internacional.